Me gustan las gafas del ministro de industria. No sólo porque se me antoja como toda una novedad que un dirigente español actual se haga eco de alguna de las tendencias estilísticas de la calle -lo que demuestra que está atento a lo que sucede en la realidad-, también debido a que el modelo Browline (la parte de arriba de la lente dibuja las cejas) es el que popularizó el líder del Power Black, Malcolm X. La versión Clubmaster de Ray Ban se volvió imprescindible para cualquier intelectual de los años 60. Por tal razón, celebro la elección: si se recupera cierta visión, quizá regrese algún día la eficacia política de antaño.
¡Pues la verdad es que no le quedan nada mal! Mejor que al Presi las suyas, seguro… 😛