Gorra, gafas de sol, camisa de flores, camiseta amarilla, bailarinas coloradas… Con tal discreción indumentaria se suponía que la primera dama estadounidense quería pasar desapercibida en sus compras en el supermercado. Obviamente la pillaron.
Michelle Obama, horror en el supermercado
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Patrycia Centeno
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- en Internacional, Primeras damas
No me puedo creer que Michelle Obama vaya a la compra, ¡siendo la mujer del presidente de EE.UU! Ya me cuesta ir a mi…
Seguramente se vistió de esa guisa para ocultar su identidad, como dices, pero habría sido mejor una peluca y un vestidito. ¡Cómo odio esas gorras!
¡Feliz semana!