Nada más conocerse el fallecimiento del dictador Kim Jong Il, los mandatarios occidentales coincidieron al adivinar que Corea del Norte iba a seguir exactamente igual. Aunque su profecía solo hacía referencia a cuestiones ideológicas y políticas, hoy comprobamos que el liderazgo de Kim Jon Un -sucesor de Kim Jong Il- también se asemeja en indumentaria y expresión corporal al de su padre.

Kim Jong Un prefiere el negro que el caqui de Kim Jong Il, no utiliza gafas de sol y, a veces, esboza alguna sonrisa (algo impensable con el viejo dictador). Lo más característico del nuevo líder es su peinado (aunque lo imitara David Beckham no estoy segura de que triunfara...). Eso sí, la chaqueta de combate y la pose igualitas a las de su padre.