Se la echa de menos. Por eso, cualquier aparición, por breve que sea, se convierte en noticia. Hoy ha abandonado por un momento su madriguera para saludar a la primera dama de Costa de Marfil. A oídas de que las encuestas dan como perdedor a su marido en los próximos comicios, la exmodelo se ha valido de un abrigo de color Bruni para hacerse ver. El resto de su estilismo muy sencillo: unos pantalones y una blusa negra con unos slippers -zapatillas que usaba la aristocracia inglesa en la casa de campo y que, en España, actualmente solo las promocionan los hijos del Duque de Feria.
Personalmente no me entusiasman los zapatos o zapatillas slippers,por muy aristocráticas que sean