El presidente del gobierno clausuró ayer la escuela de verano del PP. Lo acompañaban Mª Dolores de Cospedal, Ignacio González y Esperanza Aguirre, entre otros. La indumentaria de todos ellos deja en evidencia que para un político es más complicado vestirse en tiempos cálidos. Porque a excepción de la secretaria general, distinta pero muy jovial con una sencilla camiseta azul cielo (PP) combinada con pantalón rojo (PSOE) y sandalias de cuña de esparto, los demás eran para echarles de comer a parte. Rajoy y Arenas emanan calor. Al presidente de la Comunidad de Madrid la chaqueta le va raquitica. Como con Eduardo Madina, en González Pons se antoja imposible quitarle la marca del pecho (aunque en un popular tiene, por lo menos, algo más de sentido) pero el valenciano podría recomendarle tono de tejano a Carlos Floriano (el cinturón de este me mata… siempre de cuero, nada de elásticos, por favor). Aguirre está encantada con su nueva adquisición estilística, en un mes no sé cuántas veces se ha puesto ya este vestido lima con abertura en el hombro. Será fresquito para pasar la tarde en el jardín, pero de ahí a salir de casa con él… BSO Radio Futura – Escuela de Calor
Detalle de la manga con volante y apertura del vestido de Aguirre. Aquí fue cuando, muy teenager, no pudo reprimirse y reconoció lo guapo que era Pedro Sánchez.